Orígenes y variedades de nuestro cuchillo tradicional
    

Hemos incorporado una nueva variedad de producto a nuestra marca de relojes. Se trata de un cuchillo, pero un cuchillo muy especial y que es parte de nuestra historia: El Corvo Chileno. Lo incorporamos porque vimos en él una posibilidad de hacer renacer este elemento tradicional, antes tan popular, pero hoy un poco olvidado y dejado solamente para ámbitos militares. Además siempre tratamos de hacer cosas con cierta identidad. Ya lo hemos presentado varias veces y aquí lo puedes adquirir: Corvo Chileno Castor.

En este artículo hablaremos un poco sobre la historia del Corvo Chileno, y cómo llegó a ser parte de nuestra tradición.

El origen del Corvo Chileno:

La aparición del Corvo Chileno se remonta a la época de la colonia. Aunque no está del todo determinado, es muy probable que este tipo de cuchillo curvado fuera introducido por los españoles en el país, en versiones que pueden ser tomadas como precursoras del Corvo Chileno. En otras partes del mundo también existe el cuchillo con hoja curva, aunque con variaciones donde lleva el filo, tamaños y disposición de la hoja. En la siguiente foto vemos distintos ejemplos. De arriba a abajo: El Alfanje ibérico-morisco, la Falcata ibérica, el Kukri nepalés y el Kerambit indonesio.

Si nos guiamos por la lógica, lo más probable es que la influencia española en nuestro país haya dado fruto al Corvo Chileno. Tal como heredamos nuestro idioma castellano, pero que lo hablamos con un acento muy distinto hoy en día en Chile. Podemos asumir que lo mismo pasó con el Corvo Chileno respecto a su antecesor, el Alfanje ibérico-morisco. Luego si nos remontamos aún más atrás, la península ibérica fue conquistadas por los árabes durante 600 años y por ende existe la influencia del medio oriente en sus armas. Así podemos ver cuchillos curvados antecesores al Alfanje, como por ejemplo la Jambiya persa y la Gumia árabe:

Las primeras referencias al cuchillo corvo en Chile las podemos encontrar en la época de la colonia. En el libro «La Araucana» de Alfonso de Ercilla en el año 1569 encontramos los siguientes textos:

Las robustas personas adornadas
De fuertes petos dobles relevados,
Escarcelas, brazales y celadas,
Hasta al empeine de los pies armados:
Mazas cortas de acero barreadas,
Gruesos escudos de metal herrados,
Y al lado izquierdo cada cual ceñido
Un corvo y ancho alfanje guarnecido.

La Araucana, Canto XXIX. Alonso de Ercilla – 1569

Así es como podemos establecer un árbol genealógico que nos permite rastrear los orígenes de nuestro Corvo Chileno desde la colonia y más atrás aún, a sus antepasados hispanos y árabes. Quién dijo que la globalización comenzó en el siglo 21? 😉

El Corvo Chileno como herramienta y arma:

El Corvo Chileno no siempre fue de uso militar, si no que llegó ahí por su relación con el trabajador y la gente de pueblo. A lo largo de la historia se nos presenta como una herramienta utilizada en el norte del país, principalmente en faenas mineras, pero también a lo largo del centro y sur de Chile con diversa utilidad. Carlos López en su libro lo define así:

«El famoso corvo chileno no era un arma militar sino que la empleaban usualmente los trabajadores agrícolas y los mineros, por ser una herramienta muy útil para el desempeño de su trabajo».

La Guerra del Pacífico. 1879-1884. Carlos López Urrutia – 2003

También encontramos más citaciones al corvo y su uso como por ejemplo:

«El roto maneja el cuchillo con destreza, y siente predilección por laborar con él. Maravillas hace con él cortando tientos para los frenos, lazos. Hermosas son las monturas chilenas hechas a cuchillo».

Grafismo animalista en el hablar del pueblo chileno; Heroísmos y alegrías arrancados del Folklore; El corvo. Oreste Plath – 1941

En el norte de Chile el corvo era utilizado por los mineros, tal como lo señala Criss Salazar en su investigación.

«Tradicionalmente, el corvo ha estado asociado a la actividad de la minería antigua del Norte de Chile. Más específicamente, el folklore oral relaciona al corvo con los mineros y barreteros, que lo usaban para cortar la mecha y hacer la perforación inicial para los tiros explosivos de la pampa nortina, entre otras utilidades»

El Corvo Chileno: Herramienta, arma y símbolo histórico. Criss Salazar – 2007

Era una herramienta versátil usada por campesinos e inclusos pescadores, para cortar cuero, redes, fabricación de monturas, fardos, etc. Seguramente su practicidad y su ambivalencia también como arma de defensa lo hicieron algo común entre el pueblo chileno. Muchos trabajadores del norte en la época de la fiebre del salitre venían desde la zona centro y sur, por lo que podemos asumir que ya traían su propio corvo (o lo adquirieron en el norte). Sumando ésto último a los antecedentes de usos antes mencionados, podemos plantear la hipótesis de que este cuchillo se usaba a lo largo del país y no era exclusivo de la zona minera – norte.

Existen registros de diversos tipos de corvos. El más conocido quizás es el corvo «Atacameño», que es en el cual nos basamos para nuestro diseño y es el que llevaban a la Guerra del Pacífico. Luego hay otros modelos que varian según su uso y origen. Los hay para trabajos de talabartería, retráctiles, artesanales, etc. En la siguiente foto encontramos de izquierda a derecha: Corvo «Parralino» retráctil, corvo «Pezuña de Diablo» y un «Corvo Suave».

La transición (o retorno) de herramienta a arma, fue a través del reclutamiento para las guerras del siglo XIX. Acá fue donde el «roto chileno», que es la gente de pueblo, campesinos y mineros, conformaron el grueso del ejército chileno, tanto para la guerra contra la confederación perú-boliviana, como para la Guerra del Pacífico, y llevándolo consigo forjaron la leyenda del Corvo Chileno.

En la cultura popular encontramos incluso cuecas (baile popular chileno) como «El Pacífico y la Pampa» que hablan del campesino que parte a la guerra con su corvo y sus hazañas:

El corvo era un arma útil para enganchar las armas enemigas, para hacer perforaciones, desarmar parapetos y remover tierra. Esto sumado a sus capacidades en la lucha cuerpo a cuerpo, lo hicieron un elemento táctico de mucha aceptación y fue asimilado en todo el ejército, más allá de las clases sociales. En la foto vemos al Subteniente José L. Herrera Gandarillas usando un corvo tal cual el soldado de del regimiento 4° de línea que está al lado.

El corvo chileno se consolida como arma militar en la Guerra del Pacífico. Existen muchos relatos que hacen mención a las hazañas de los soldados chilenos, como por ejemplo la toma del morro de Arica, el 7 de junio de 1880. Esta acción fue llevada literalmente cuesta arriba, luchando cuerpo con la ayuda de la «chupilca del diablo» y sus corvos. Francisco Antonio Machuca y Marín, en su obra “Las cuatro campañas de la Guerra del Pacífico”, relata la relación con el corvo así:

“Las tropas montadas labran con él estacas para atar el ganado. Los infantes cortan fajina para sus chozas y leña para el rancho; con él se abren las latas de conserva, se desuella un cordero, y en los entreveros, presta inapreciables servicios como arma corta y silenciosa. Nuestro soldado no va con equipo completo si carece de él. Su uso —sugería— debiera ser reglamentario y obligatorio”.

Las cuatro campañas de la Guerra del Pacífico. Francisco Antonio Machuca y Marín – 1928:

El corvo hasta nuestros días

Luego de siglos de uso y su rol tanto como herramienta y arma en la historia de nuestro país, comienza su desuso. La urbanización que llega con la modernidad provoca una migración hacia las ciudades y por ende, el uso de una herramienta como el cuchillo se hace menos habitual. Luego un largo período de ausencia de guerra también hace que su uso como arma vaya quedando de lado.

Aún así, en el año 1963, el Corvo Chileno fue oficializado como arma oficial del ejército. Así lo declara el entonces Capitán José A. Quinteros Masdeu, en sus memorias:

«Mientras se buscaba un arma blanca, característica, que pudiese ser llevaba al combate como complemento del armamento individual, de entre las sombras de la historia y su espontáneo y victorioso uso durante la Guerra del Pacífico, surgió y renació el terrible corvo, el que fue unánime y entusiastamente aprobado por todos.  Sin embargo, la tarea no fue fácil porque en los museos habían diversos tipos de corvo que usó el roto chileno (hecho y fraguado por él mismo)…»

Génesis de los Comandos del Ejército de Chile y su trascendencia institucional. José A. Quinteros Masdeu – 1999

Así fue como se llegó a dos variedades utilizadas por el ejército y que fueron fabricados a partir del año 1970 por FAMAE:

El Corvo Comando: Hoja con curvatura en 90°, con filo en ambos lados

El Corvo Atacameño Militar: Hoja con curvatura de 45° y filo sólo en laparte interior de la curvatura.

El cierre de la filial Andes SAM en el año 2000, que era la encargada de producir los corvo para FAMAE, puso en jaque la producción de este cuchillo. Algunas empresas españolas lo fabricaron por un tiempo, pero no había una producción establecida, hasta hoy.

El Corvo Chileno Castor

El Corvo Chileno surgió de manera espontánea en nuestra sociedad criolla y era parte integral de nuestra idiosincrasia popular. Su paso al uso militar fue una consecuencia natural de las circunstancias sociológicas, donde la gente que peleó por nuestro país venía de las capas populares que llevaron consigo su herramienta que servía también de defensa.

Luego de recorrer los orígenes e historia de nuestro cuchillo emblemático, y ante la falta de su disponibilidad para su uso no militar, es que nos propusimos como empresa a desarrollar un modelo adaptado a nuestros tiempos.

Nos pareció de suma importancia el recuperar este símbolo que es parte de nuestro pueblo y costumbres. Creemos que como todo símbolo, pertenece a toda la sociedad. Es por eso que diseñamos un modelo para que lo puedas tener en tu casa ya sea de colección, para el uso diario o también para llevarlo de camping o a la montaña.

Lo pensamos como una herramienta y no un arma. Por eso lo redujimos en tamaño para que sea un cuchillo plegable y así puedas manipularlo y transportarlo de manera sencilla. Nos basamos por estética, en los corvos clásicos utilizados en la Guerra del Pacífico. Así es como la curvatura de la hoja es más suave, comienza desde el mango y con el filo sólo por el interior. A su vez una curvatura más suave le da más funcionalidad en cortes más cotidianos en el hogar. Utilizamos acero inoxidable 440, conocido como acero quirúrgico, con un buen equilibrio entre la conservación de su forma y la resistencia al óxido. Su mango está cubirto con madera, que es algo característico de nuestra marca. Utilizamos en este primer modelo las maderas palo de rosa y pakkawood.

Puedes visitar una descripción más detallada de nuestro corvo chileno haciendo click AQUÍ

Esperamos que hayan disfrutado de nuestro artículo y que les guste nuestra versión del cuchillo. Queremos escribir una pequeña página más en la historia de nuestro cuchillo tradicional y por sobre todo, darle una renovada vida. 🙂